En “The Hitchhiker’s Guide To The Galaxy”, uno de mis libros favoritos, Arthur Dent, después de haber descubierto que su mejor amigo era un extraterrestre, enterarse de que los seres humanos eran tan solo la tercera forma de vida más inteligente, y de que la tierra va a ser destruída para hacer una autopista intergalactica, anuncia:
Debe ser Jueves. Nunca le agarré la onda a los Jueves.
Sé como se siente. No acerca de los Jueves, en mi caso es acerca de los Miércoles. Nunca le he agarrado la onda a los Miércoles. Esto tiene que ver con la forma en la que crecí. En Sheffield, donde crecí, los Miércoles eran medios dias de trabajo. Esto quiere decir que todo (I cuando digo todo quiero decir tiendas/bancos/cualquier cosa importante menos las escuelas) cerraba a mediodía. Las tardes de Miércoles parecían Domingos – Porque cuando yo era niño, todo (y quiero decir todo) cerraba los Domingos. Esto hacía que Sheffield se sintiera raro y misterioso los Miércoles por las tardes, y no creo que eso se me haya pasado nunca. Lo que definitivamente no se me pasó es el equipo de futbol Sheffield Wednesday. En mi ciudad hay dos equipos de futbol Sheffield United y Sheffield Wednesday. Yo crecí siendo fan de Sheffield United porque mi papá y mamá lo eran también. Claro, esto quiere decir que mis archirivales eran los odiados Sheffield Wednesday. Tanto me desagrada este equipo, que por muchos años escribí Wednesday (Miércoles) así: W*dn*sd*y. De hecho no fue hasta que conocí a María, y que compartimos el día más perfecto (Covent Gardens, El Canon en D de Pachelbel) que reinserté una vocal: W*dnesd*y. Claro, dos meses después me cambié a México y empecé a dar clases en BAI, lo cual finalizó todo eso (Aunque con gran gusto empezaré a escribir W*dnesd*y). En fin, para no hacerla más larga, Nunca le he agarrado la onda a los Miércoles.
Aunque empezó bien. ¡MIss Claudia estaba de regreso! Pero la semana de exámenes siempre es rara. Los niños estan estresados – ya sea porque se estresan solos, porque sus papás los estresan, o porque los maestros los estresan simplemente con hacerlos hacer exámenes. De quien quiera que sea la culpa, el resultado es siempre el mismo: bajo cierta cantidad de presión, los niños explotan. Esta es la norma, y, siendo maestro, una de las habilidades que debes tener, es poder reconocer cuando los niños necesitan que los dejes despresurizarse. Aceptar que, después de una mañana de exámenes y de estudiar para mas exámenes, hay pocas probabilidades de que se logre mucho en la tarde. Sin embargo, el alza en temperatura, mas el hecho de que Miss Claudia no estaba (así que los alumnos la pasaron conmigo todo el día), nos llevó a una situación durante los últimos dos dias en la que los estudiantes han estado un poco relajados en cuanto a las reglas del salón de clases. Por esto, con la normalización de la temperatura, y Miss Claudia de regreso, era hora de reforzar las reglas. Sólo un poco. Acepto que aún estamos en época de exámenes, pero un poco de reforzamiento era necesario. Desafortunadamente, no todos estaban completamente de acuerdo, y nunca le agarré la onda al día de hoy. Cuando un examen termina y toda la clase ha terminado, es hora de pasar a otro tema. Todo lo que estudiamos hoy, estará en el examen del mes que viene, así que los estudiantes necesitan escuchar, poner atención, y aprender cosas nuevas. No nada mas estar contentos de haber presentado ya un examen y asumir que ya se acabó el día.
La mañana empezó con Educación física. Tuvimos Matemáticas, seguidas de Música (Quizá alguien quiera contar la historia de “el pájaro en la biblioteca” en los comentarios porque yo no la entendí por completo). El examen de Inglés fué seguido por el descanso. Después Español, y luego repaso de Ciencias. El día terminó con la conquista de Troya y un poco de la jornada de Odiséo a casa – está atrapado en la cueva de un Cíclope al momento.
Tarea:
- Ciencias: examen mañana.
- Lectura: deberían de estar leyendo por 20 mins todas las noches.
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